En la tierra de los Sanfermines tendremos el “encierro” más destacado, con las cuatro mejores parejas del circuito Pádel Pro Tour pugnando por hacerse con el título de los I Internacionales Seguros Lagun Aro. El público pamplonica ya sabe lo que es el mejor pádel del mundo y fue testigo este viernes en el Navarra Pádel de cuatro buenos partidos que definieron a los semifinalistas del certamen.
En el encuentro inaugural, Gaby Reca y Hernán Auguste hurgaron aún más en la herida de una pareja rota anímica y deportivamente hablando. Seba Nerone y Cristian Gutiérrez siguen sin encontrar el camino que les permita salir del bache en el cual han caído esta temporada. Con suma facilidad los “viejos rockeros” consiguieron el pase a semifinales venciendo en dos sets 6/2 y 6/3.
Sin restar méritos al gran trabajo de Bebe y Gaby, hay que ser justos y decir que el duelo se decidió en parte por el elevado número de errores no forzados que cometieron sus rivales. El propio Cristian Gutiérrez confesaba nada más salir de pista que había jugado uno de sus peores partidos desde que es profesional y es que fue sin dudas una de sus tardes más grises.
No había trascurrido la primera media hora y el marcador ya reflejaba un 5-1 a favor de Auguste-Reca en el primer set, producto de los dos breaks conseguidos al saque de Cristian. Hubo una tímida reacción, cuando lograr descontar una de las desventajas en el séptimo juego, rompiendo el servicio de Gaby. Sin embargo, al juego siguiente llegó una nueva rotura al saque de Seba que sentenciaba el primer set.
Algo similar a este final ocurrió al inicio del segundo set, cuando Seba y Cristian arrancan con break arriba que no logran consolidar. Fue ese el último gramo de esperanza de la ex pareja número 2 que careció de sorpresa en su juego y se repitió en los fallos. A eso debemos sumar el trabajo de los rivales que ganaron la red y estuvieron finos con sus golpes. Bebe no le pegó tanto por arriba como es habitual pero conectó algunos passing de lujo que arrancó el aplauso del público.
Un resultado claro y contundente, que vuelve a meter a Auguste-Reca entre las cuatro mejores parejas de un torneo y aumenta la preocupación de estos “desconocidos” Nerone-Gutiérrez.
Lima-Mieres pasan sufriendo
Juani Mieres y Pablo Lima tuvieron que esperar hasta el octavo juego del tercer set para respirar aliviados y sentirse ganadores de la eliminatoria ante Willy Lahoz y Marcello Jardim, que a punto estuvieron de dar la sorpresa.
Haciendo una rápida evaluación antes del partido, más de uno se aventuró a decir que los “príncipes” no tendrían mayores inconvenientes para avanzar a la siguiente ronda. Teniendo en cuenta los antecedentes y sumado el esfuerzo que realizaron Jardim –Lahoz por la mañana para vencer en tres sets a Demianiuk-Arias, todo hacía prever que Lima-Mieres lo resolverían rápido.
Lahoz-Jardim sorprendieron en este torneo cambiando posiciones, jugando Willy al drive y Marcello al revés, una fórmula que gustó y por lo visto puede ser más efectiva.
Los príncipes sacaron ventajas en el primer set, haciendo su juego rápido, imprimiendo mucha velocidad y presionando constantemente en la red. Pero a medida que avanzaba el encuentro se fueron sintiendo más incómodos al no encontrar huecos por donde hacer daño a sus rivales.
El break en el tercer juego del segundo set parecía ser definitivo para la victoria de Lima-Mieres, pero en el décimo, cuando Pablo sacaba para cerrar, llegó la primera rotura de Lahoz y Jardim, igualando el marcador y ganando luego la definición en el tie break.
Todo quedaba para definirse en el tercer set, que fue muy igualado hasta ese octavo juego, cuando los ganadores consiguieron romper el saque de Marcello a la cuarta oportunidad que tuvieron.
Juan y Bela con esfuerzo
Los números 1 se encontraron con dos versiones de Silingo-Grabiel en un mismo partido y finalmente pudieron sacar adelante una eliminatoria complicada, venciendo por 6/2 y 7/6.
En el primer set todo fue muy rápido, con puntos que se resolvían a gran velocidad. Juan y Bela lograron dos breaks, en el cuarto y el octavo juego, ante unos rivales a los cuales les costó asentarse en la pista.
Para el segundo set salió la otra versión de Silingo-Grabiel, la antigua, aquella en la que Agustín volaba por los aires castigando con su smash. Y esa versión ya no gustó tanto a Díaz-Belasteguin, quienes debieron replegarse y defenderse más en el fondo de la pista.
Fueron punto a punto hasta llegar al tie break, donde ahí sí los números 1 tuvieron más pegada y resolvieron el pase a semifinales.
La regularidad de Miguel y Matías
En el cierre de la jornada de cuartos, Miguel Lamperti y Matías Díaz vencieron por 6/0 y 7/6 a Fernando Poggi y Sanyo Gutiérrez, en un encuentro de similares características al anterior, con dos sets muy diferentes.
No hacen falta muchas explicaciones para comentar lo del primer set. El resultado habla a las claras de que fue un monólogo de Lamperti-Díaz, que contaron con la ayuda de la gran cantidad de errores no forzados que cometieron sus rivales. Sanyo y Poggi entraron como fríos, dormidos, como desconectados de un partido tan importante.
Por suerte olvidaron rápidamente todo lo malo y fueron más incisivos en el segundo set. Sanyo entró más en juego, conectó muy buenos golpes y el partido fue más igualado. Salvaron bolas de break en el quinto y séptimo juego, para mantener su servicio y llegar hasta el tie break. Allí levantaron dos bolas de partido, llegaron a tener una bola de set, pero terminaron cayendo en una jugada insólita. Matías logra sacar desde la misma esquina una bola que se pegaba a la alfombra, el tiro sale con gran elevación y casi pegado a la reja, lo cual sorprende a Poggi que pegado a la red no logra darle y a pesar del esfuerzo no puede recuperarse.
Lamperti-Díaz mantienen su regularidad estando presentes nuevamente en la fase final de un torneo, con ganas de repetir los éxitos de Mar del Plata y Mallorca, y el gran desafío de volver a verse las caras con los números 1.
Textos: Oscar Solé
