Excelente RELFEXIÓN para estimar cuántas clases puedes dar cada día ¿Qué opinas?

Cuantas clases impartir cada dia

Un artículo de:

Ariel Cortez Hernández

  • Ariel Cortez Hernández
  • Linkedin: Ariel Cortez Hernández
  • Técnico Nivel 1 en tenis y pádel
  • 13 años de experiencia
  • Monitor en Pádel Zaragoza
  1. CONOCE LA REALIDAD DE TU CLUB:

Unos de los primeros pasos para calcular este número (¿cuántas clases dar al día?) es saber la capacidad de expansión que tiene tu club de cara a abarcar más alumnos y, por tanto, más grupos para dar clase.

Es sabido que un monitor debe su trabajo a sus alumnos y es preciso que el propio club abastezca esta relación así como el propio monitor debe proporcionar medios para facilitar la incorporación de nuevos alumnos ya sea por labores de marketing o por renombre. De ahí viene la necesidad de un club para abarcar más alumnos y que la Escuela de pádel sea sostenible a nivel económico mientras esté en concordancia con el ecosistema del club (alquileres, pistas fijas de socios, eventos, etc.). Es decir…

  • no es lo mismo un club social, un club privado o un club municipal.

En cuanto a clubes sociales, la razón principal es satisfacer las necesidades de los socios y esto lo lograremos ofertando las clases y organizando torneos internos entre otras actividades.

Los clubes privados tienen una oferta mayor en sus servicios y las posibilidades son más amplias, por tanto, como monitores tendremos una mayor probabilidad de explorar nuevas facetas de nuestro trabajo (clinics, nivelaciones de jugadores, clases particulares, etc.). En cuanto a lo que se refiere a la escuela, existe una mayor posibilidad de adaptar los horarios a sus alumnos y esto genera un ambiente positivo para poder tener un mejor y más amplio horario de trabajo.

Por último, un club municipal mantiene su oferta de grupos en un horario fijo, por tanto las horas que podamos abarcar dependerá en gran medida de este factor.

Esto es, a grandes (grandísimos) rasgos lo que deberíamos tomar en cuenta para poder hacernos una idea de lo que podemos llegar a abarcar, pero también existen otros factores tales como:

  • la compatibilidad horaria,
  • si es que tenemos otro trabajo,
  • si solo damos clase los fines de semana,
  • si solo podemos abarcar clases de bajo nivel,
  • el tipo de contrato que tengamos,
  • si disponemos de unas horas aseguradas al mes, etc.
  1. PLANIFICA TUS HORARIOS:

Conociendo estos factores, podemos confeccionar nuestro horario de trabajo.

Normalmente las horas punta suelen ser por la mañana entre las 09:00 y las 11:00 y a partir de las 18:00 hasta más o menos las 22:00 horas.

El saber que trabajaremos “cuando la gente puede” significa saber que nuestro horario de trabajo será entre esas franjas horarias. Es decir, tendremos un horario partido y con mucha probabilidad de fin de semana también.

Ahora bien, respondiendo a la pregunta sobre cuántas horas de clase dar al día, la respuesta puede parecer sencilla: las que puedas aguantar. Esto significa que depende de nuestra capacidad física y psíquica para poder aguantar una jornada de trabajo durante 5 ó 6 días.

Hay que recordar que es un trabajo de estar muchas horas de pie. Habrá días y semanas que tengamos que “jugar” en todas o en la mayoría de nuestras clases lo que va pensando a medida que va pasando la semana. Tendremos que compaginar todo esto con las clases particulares y eventos del club no olvidando nuestra vida personal.

Una buena forma de saber cuántas horas podemos trabajar es sumar la cantidad de clases a la semana. Normalmente suele rondar entre 20 y 30 horas a la semana. Exceder las 30 horas semanales requiere una gran condición física y mental.

No todas las clases serán iguales, habrá clases más exigentes y otras más amenas. Evidentemente las clases amenas son más divertidas y más amables, pero la realidad es que no todas las clases serán iguales. Es aquí donde interviene nuestra paciencia, nuestra capacidad de empatizar y nuestra vocación como docentes.

En resumen, una media razonable de clases que podamos dar diariamente rozará las 6 ó 7 horas. Entre ellas combinaremos clases particulares, clases de grupo y entrenamientos de equipo.

La realidad es que este horario laboral no será todo seguido, tendremos clases por la mañana, quizás a mediodía y por la tarde casi con total seguridad.

  1. GESTIONA TUS CLASES:

Conociendo esto, podemos gestionar nuestro horario laboral. Esto no quiere decir que nuestras clases son movibles. Todo lo contrario, sabiendo que los grupos son con un horario fijo semanal, podemos adaptar el resto de actividades (clases particulares, entrenamientos de equipo, etc.).

Las clases particulares, al ser algo más flexibles en cuanto a horarios, las podemos asignar en horarios donde nos vengan bien. Por ejemplo, si tenemos una clase de grupo fija a la semana a las 10:00 de la mañana, podemos cuadrarnos una clase particular a las 09:00 de la mañana. De esta forma no tendremos “horas muertas” y tendremos nuestro horario lo más seguido posible.

Las horas muertas son uno de nuestros peores enemigos ya que nos atan a permanecer en nuestro club, nos obligan a “no desconectar” pues no tenemos toda la privacidad que podamos desear y a la larga termina sacrificando nuestro tiempo libre. Esto no quiere decir que nos aislemos de nuestro trabajo. Somos una cara visible de nuestro club y es totalmente normal que la gente nos salude, quiera hablar con nosotros y compartir algunos momentos. Esto es un muy buen indicativo de que nuestro trabajo gusta a la gente. Por lo tanto, hay que tener un equilibrio en nuestro horario laboral procurando tener el máximo de horas seguidas para evitar esas horas muertas.

  1. REALIZA TU AGENDA SEMANAL Y MENSUAL:

Una vez hecho esto, debemos procurar mantener nuestros horarios para que nuestras actividades y nuestro tiempo sea aprovechado de la mejor manera.

A la hora de compatibilizar la vida laboral con la vida personal debe existir un cierto equilibrio. Esto nos ayudará a tener los horarios más controlados y poder organizar mejor nuestro trabajo y nuestra vida en general.

Es cierto que nuestro trabajo es de cara al público y que muchas veces tendremos que sacrificar nuestro tiempo de ocio. Pero aceptando esto, es una profesión muy interesante, intensa y con muchas cosas positivas.

  • Hacemos deporte mientras trabajamos,
  • no tendremos el estrés de otras profesiones,
  • veremos cómo la gente progresa mientras mantiene hábitos saludables
  • y veremos que a la larga nuestro trabajo se convierte en una válvula de escape.

Todo esto hace que los problemas que puedan surgir los trataremos de una forma distinta.

Aprende más sobre el mundo profesional de los monitores de pádel con Ariel Cortezl:

Conoce la profesión de monitor de padel

Dejar respuesta