El tenis es uno de los deportes con menor cantidad de auspicios y patrocinadores vinculados a casas de apuestas y casinos. Sin embargo, se trata de una situación que puede cambiar en los próximos años.
La razón tras esta particularidad nace de una resolución aprobada en 2018 por la ATP, la cual estableció restricciones sobre este tipo de patrocinios. Sin embargo, en un lapso de tan solo dos años, dichas limitaciones tuvieron que ser cuestionadas.
La ATP anunció que, para 2021, los patrocinios de apuestas comenzarán un paulatino regreso. Por lo tanto, a partir de este mismo año, empezaron a celebrarse torneos y eventos promocionados por casas de apuestas populares.
El regreso de los patrocinios de las casas de apuestas al tenis
Entre las principales razones que llevaron a los directivos a dar marcha atrás se encuentran factores económicos, sociales y deportivos. Para empezar, dejar fuera de juego a auspiciantes históricamente importantes provocó daños que hoy no se puede permitir el deporte (más tratándose de una prohibición que no logró cosechar logros de ningún tipo).
Por otro lado, en el ámbito económico, la prohibición del 2018 dejó sin posibilidad de invertir en publicidades al único sector de la economía que siguió creciendo en épocas de coronavirus. Mientras la mayoría de las industrias se contrajeron, las casas de apuestas experimentaron un auge, lo que les permitió invertir millones de dólares en publicidades (de las que el tenis no pudo beneficiarse).
De esa forma, sin la posibilidad de vender entradas para los partidos, con las aerolíneas y petroleras fuera del mercado de las publicidades, y con el sector textil también trabajando por debajo de sus expectativas, la ATP coincidió en que el regreso de las casas de apuesta como patrocinadores le daría un respiro a la industria.
En cuanto a lo social, también ocurrió que las diferentes organizaciones que resolvieron prohibir las publicidades de las casas de apuestas y casinos no estaban ayudando con el verdadero problema: la imposibilidad de identificar páginas fiables para apostar.
En otras palabras, la prohibición solo logró restringir la información de las páginas de apuestas online confiables y beneficiar a las que acuden a publicidades maliciosas. De esa forma, el problema lejos de desaparecer, terminó agravándose.
Por ejemplo, si alguien quisiese jugar al famoso juego de azar Book of Dead, y no encontrase ningún sitio fiable con información de casinos legales y regulados, es altamente probable que termine jugando en un casino ilegal y pierda su dinero.
Por último se encuentra el factor deportivo. Como bien sabemos, el deporte es uno de los pilares de la salud humana. Y tras la pandemia, muchos deportistas dejaron de entrenar, ya sea por falta de incentivo personal o el deterioro de las instituciones deportivas.
Mientras seguían llegando las noticias de suspensiones de partidos, la sociedad comprendió que las casas de apuestas podrían jugar un rol muy importante en la recuperación del tenis, y que sus efectos a largo plazo podrían superar con creces cualquier otro beneficio que pudiera aportar cualquier prohibición a la publicidad.
Si bien de momento las publicidades no son muy abundantes, con la caída de las restricciones será cada vez más frecuente la presencia de las casas de apuestas y los casinos online en el tenis.
Con todo esto me queda una interrogante ¿Seguirá el pádel el mismo camino viendo casas de apuestas entre los patrocinadores principales de jugadores y torneos?
