Jugar al pádel es un placer, ya que te asegura un buen entrenamiento así como un deporte aliado para tu salud siendo una excelente herramienta de ocio con la que pasar un rato entretenido entre amigos y amigas. Sin embargo, deberás conocer las claves para no lesionarte y mantener un buen nivel de juego que no te aporte contracturas ni daños musculares u óseos. Además de todo esto, deberás tener cuidado de no protegerte en recintos exteriores ya que te expondrás a padecer incómodas quemaduras solares.
Para realizar calentamientos, puedes dedicar un tiempo a correr, pueden ser alrededor de quince o diez minutos y realizar una rutina de al menos de un cuarto de hora más para dedicar un tiempo a ejercicios de estiramientos. Éstos serán muy básicos y comunes para todos los deportes, haciendo más hincapié en los tobillos y las muñecas así como en las pantorrillas.
Primero siéntate en el suelo o en una colchoneta y estira tus piernas apoyadas en el terreno de forma que recrees una V, luego con tus brazos estirados y juntos ve alcanzando las puntas de tus pies, siempre teniendo cuidado de no provocarte un tirón e ir aumentando la flexibilidad y la rapidez poco a poco. El próximo paso será crear círculos con los tobillos y las pantorrillas en el aire, de pie, siendo precavidos/as para no perder el equilibrio.
Igualmente para entrenar los cuádriceps, de pie dobla tus piernas, agarrando por la zona trasera con las manos tus tobillos, aguanta un poco y suelta para repetir el ejercicio con la otra pierna. El siguiente paso será mover los brazos creando círculos hacia adelante, hacia atrás y hacia los laterales. Si estos entrenamientos te parecen demasiado generalistas, siempre podrás recurrir a algunos entrenamientos previos de pilates o incluso tai chi. Los ejercicios preventivos se deberán de hacer tanto antes como después de jugar el partido para liberar a los músculos del estrés producido.
